La Policía Nacional y la Guardia Civil han requisado 4.500 kilos de hachís en una operación conjunta emprendida en Humanes y San Sebastián de los Reyes. Se trata del mayor alijo de la última década en la región. La intervención se ha saldado con 11 detenidos de nacionalidad española y marroquí. Todos han ingresado en prisión.
El grueso de las investigaciones arrancaron con el seguimiento de una tapicería instalada en una nave de Humanes por donde pasaban gran cantidad de la droga que llegaba desde el norte de África a través de un corredor procedente de Andalucía. El costo se enviaba posteriormente en camiones de transporte hasta Bélgica y países cercanos, donde este tipo de sustancias tiene un valor tres veces al de España.
Los agentes han llevado a cabo ocho registros, coordinados por el Juzgado de Instrucción Número 6 de Fuenlabrada, en una nave de Humanes y en siete viviendas de Móstoles, Parla, Madrid y San Sebastián de los Reyes, donde la organización utilizaba un piso como guardería para la droga.
El delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, el jefe superior de Policía, Manuel Soto, y el general jefe de zona de la Guardia Civil, José Antonio Berrocal, han ofrecido hoy detalles de las actuaciones que comenzaron a finales con la incautación de 200 kilos de hachís.
Según han detallado, la organización estaba dividida en dos estructuras: la primera recibía la droga que llegaba desde el sur del país, probablemente a través de la ruta africana, y la segunda la exportaba a países como Alemania, Bélgica y Bulgaria, donde su precio se triplica.
Para los envíos contaban con la colaboración de transportistas, a los que pagaban cantidades de hasta 7.000 euros para ocultar la droga entre la mercancía que cargaban en sus camiones.
Redacción