Este ejercicio es el principal evento del año para el adiestramiento del personal que conforma el JFAC (Componente Aéreo de la Fuerza Conjunta).

Se trata de un ejercicio conjunto de puestos de mando de toda la estructura operativa de las Fuerzas Aéreas, en el que el Ejército del Aire y del Espacio ha puesto a prueba su capacidad de mando y control aeroespacial.

Partiendo de un Plan de Operaciones y una Orden de Coordinación Conjunta del comandante operacional, jefe del Mando de Operaciones del Estado Mayor de la Defensa, los aproximadamente 250 integrantes del JFAC, incluyendo oficiales de enlace del resto de mandos componentes, se metieron de lleno en un escenario ficticio, el archipiélago celtíbero.

El objetivo, llevar a cabo una operación militar de alta intensidad frente a una amenaza no compartida que se inicia como respuesta a una crisis.

Tras cuatro días de ambientación, CMOPS declara el inicio del ejercicio y el comandante del JFAC (COMJFAC) establece la Directiva de Operaciones Aéreas donde define cuáles son sus intenciones y diseña una estrategia para conseguir unos objetivos operacionales.

A partir de ahí se pone en marcha toda la maquinaria y el personal del JFAC, distribuido en varias divisiones estrechamente interconectadas y con procesos transversales, comienza a planear, conducir y evaluar los resultados obtenidos, convirtiendo las intenciones e instrucciones del COMJFAC en órdenes concretas para pilotos y tripulaciones que son ejecutadas mediante misiones aéreas.

La responsabilidad del mando y control de las operaciones aeroespaciales se concreta en la figura de un único comandante aéreo que planea y conduce las operaciones aeroespaciales con el empleo de forma efectiva las capacidades y fuerzas bajo su mando. Asimismo, ejerce sus responsabilidades delegadas como Autoridad de Control del Espacio Aéreo y como Comandante de la Defensa Aérea y Antimisil.

Este esfuerzo individual, junto al esfuerzo colectivo realizado en las distintas activaciones del JFAC para los ejercicios que realiza a lo largo del año, permite a esta estructura ir superando con éxito todos los hitos para su certificación por parte de la OTAN en 2023. Este es el paso previo para que el ESP-JFAC se constituya como Mando Componente Aéreo de la Fuerza de Reacción Rápida (NRF) de la Alianza Atlántica en 2024.