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El general de Brigada español hace balance de sus seis meses al frente de la misión europea

El comandante de la misión de entrenamiento de la UE del Ejército de Malí (EUTM Malí), general de brigada español Alfonso Garcia-Vaquero Pradal, ha admitido que éste «no tendrá éxito por sí solo» todavía en la lucha contra el terrorismo y seguirá necesitando ayuda de fuerzas internacionales pese a destacar el progreso que han hecho en cuanto a formación.

«Las fuerzas armadas malienses están haciendo un progreso bastante bueno en el entrenamiento. La situación no es fácil», ha admitido el general español en rueda de prensa para hacer balance de los seis meses que lleva como jefe de la operación, a la que España aporta el grueso de efectivos, con unos 130 miliares del total de 560 con los que cuenta, incluidos unos 200 instructores y el resto, efectivos de fuerza de protección, apoyo médico y logístico.

«La reforma del Ejército maliense está produciéndose en una situación muy completa y cambiante en medio de negociaciones de paz, actividades terroristas que continúan y de violencia interétnica en el norte y centro del país», ha explicado.

«Malí está haciendo frente a estos desafíos múltiples pero no tendrá éxito por sí solo», ha admitido, preguntado sobre cuándo las fuerzas malienses serán capaces de contener la amenaza yihadista de forma autónoma, sin el apoyo de fuerzas internacionales.

La UE lanzó a principios de 2013 la misión de entrenamiento EUTM Malí con el objetivo de formar a cuatro de los ocho batallones del Ejército malienses para que ellos pudieran controlar la amenaza yihadista y restablecer la integridad de su territorio, especialmente en el norte del país y contribuir a reformar sus fuerzas armadas, especialmente para dotarlas de una cadena de mando estructurada.

Los Veintiocho acordaron en abril de 2014 prorrogar dos años más la misión, hasta el 18 de mayo de 2016, para poder formar también a los otros cuatro batallones de las fuerzas armadas que no habían recibido entrenamiento de la misión europea.

«Esto será suficiente para defender al país. Esperamos hacer esto (completar la formación) antes de que termine el mandato», ha explicado el general español.

SEIS DE LOS OCHO BATALLONES, YA FORMADOS

La misión europea ha formado ya a seis batallones de los ocho en total, cada uno de ellos compuesto por unos 610 efectivos y que reciben un entrenamiento de doce semanas, según ha precisado el general de brigada Garcia-Vaquero Pradal.

«Les entrenamos sólo en cuatro misiones. Todas operaciones defensivas: control del área, reconocimiento, acción de bloqueo y neutralización de una amenaza aislada», ha puntualizado, recordando que los europeos no tienen un mandato ejecutivo ni acompañan sobre el terreno a las fuerzas malienses cuando se despliegan en el conflictivo norte del país, una vez recibido su entrenamiento.

El nuevo mandato de la misión también asumió la supervisión de los batallones entrenados en sus propias guarniciones y actividades re-entrenamiento y asesoramiento en los centros de mando regionales en la zona de acción de la misión, en el sur de Malí y asimismo ha promovido la formación de adiestradores malienses, para que ellos mismos puedan asumir el entrenamiento de sus propias fuerzas en el futuro.

El general de brigada español ha subrayado la importancia de volver a reentrenar a los batallones ya formados en base a «las lecciones» aprendidas en el teatro de operaciones cuando regresan del frente y ha valorado satisfactoriamente también el entrenamiento descentralizado. En la actualidad están instruyendo de nuevo al cuarto batallón y esperan volver a entrenar al quinto y sexto antes de concluir la misión.

Así, se han percatado de que las fuerzas malienses necesitan por ejemplo «entrenamiento especializado para conducir en un terreno desierto» y cambiar el entrenamiento en tiro, de los 200 metros a 100 metros. Alemania, el segundo país contribuyente a la misión, también está formando a los malienses para cruzar el río Níger en situación de combate.

«El entrenamiento de las fuerzas malienses en sus guarniciones es crítico para sostener las capacidades operativas. No obstante, los requisitos operativos y logísticos de las fuerzas armadas malienses representan un desafío continuo», incluido por la dimensión geográfica del país y «los recursos limitados» de los que dispone la misión, ha explicado.

El general de brigada español ha confiado en que en un futuro se cree un sistema que permita canalizar equipos de países donantes para Malí, que no contará por ejemplo con helicópteros hasta 2019 según la programación de inversión de Bamako. También tiene capacidades limitadas de evacuación médica.

También ha subrayado que será «esencial» dotar al Ejército maliense de su propia capacidad de formación para «el éxito de la misión». Un total de 80 instructores malienses ya han sido formados y se prevé formar a otros 80 antes del final del mandato de la misión.

MINISTERIO DE DEFENSA DE ESPAÑA