El grupo de la Jefatura de Información de la Guardia Civil que investiga los movimientos de Tsunami Democràtic ha identificado a varios agentes de los Mossos d’Escuadra infiltrados en las revueltas del 1-O organizadas por el brazo callejero del independentismo. Tras la sentencia del procés cientos de radicales salieron a las calles de Barcelona para organizar barricadas y provocar graves disturbios, entre los que se encontraba el lanzamiento de baldosines, la quema de contenedores de basura y la rotura de escaparates.

La tesis de los investigadores se apoya en el análisis de varias imágenes difundidas a través de las redes sociales durante las noches que hubo más disturbios. El informe recoge una fotografía del 18 de octubre de 2019 en la que se observa cómo personas que ocultaban su rostro lanzaban proyectiles antidisturbios que con los que sólo trabajan los mossos. «Un grupúsculo portando capuchas y sudaderas, así como bufandas tubulares», remarcan. Estas personas fueron fotografiadas en las inmediaciones de la Plaza de la Independencia de Gerona.

De la misma manera, la Guardia Civil también aporta imágenes de los proyectiles usados durante las revueltas no para disolver a los violentos sino para participar con ellos en las acciones delincuenciales. Se trata de pequeñas balas de plástico de color verde y negro de cuatro centímetros de longitud. «La siguiente imagen muestra un proyectil antidisturbio de foam. Dicho proyectil es usado por los mossos en las alteraciones de orden público», afirma. También se identificaron a los individuos sospechosos de ser mossos en otra instantánea de ese mismo día a las 22.39 horas donde se aprecia humo y luz de fuego de algún mobiliario urbano en los piquetes que se organizaron en la calle José Canalejas.

Casualmente, las imágenes que están siendo objeto de investigación policial fueron intercambiadas entre Josep Campmajò, cabecilla de Tsunami Democràtic, y el expresidente catalán Carles Puigdemont. En los chats que ambos mantienen, cuyo contenido está en manos de los investigadores, se hace alusión a Tsunami como plataforma organizadora de las revueltas como «herramienta para la consecución de la independencia». La Guardia Civil también interceptó mensajes en los que Campmajó reconocía no sólo que estaba detrás de las revueltas, sino que participó activamente en ellas.

«Ayer estuve nuevamente en primera línea. Tanto en Barcelona como en Girona. Mi gente está bien distribuida», dijo Campmajó a Puigdemont. Este mensaje es clave para los investigadores porque se constata que «su gente» podían ser, entre otras personas, los mossos infiltrados. Ambos usaban la aplicación de mensajería encriptada Signal, común entre los usuarios que quieren asegurarse el blindaje absoluto de sus comunicaciones.

Cortes en carreteras

Los chats que la Guardia Civil encontró en el ordenador de Campmajó confirman que Tsunami Democràtic estuvo detrás de todas las convocatorias de cortes de carreteras que hubo durante aquellos días. Uno de los más llamativos fue el de la obstrucción de la AP-7 en La Jonquera, cercana a la frontera entre España y Francia. Durante aquel corte se llevaron a cabo multitud de destrozos de mobiliario público, barricadas e incluso se montó un escenario en plena autopista. Todo esto provocó «importantes perjuicios económicos para el Estado, además del inestimable riesgo para la seguridad vial y perjuicio para el resto de conductores».

Los investigadores han hallado las conversaciones de un grupo de Signal llamado Fem Sal donde uno de los coordinadores de Tsunami Democràtic reivindicaba el corte de esta autopista así como otras acciones paralelas que se llevaron a cabo en Madrid, entre las que se encuentra la simulación de un atasco en las inmediaciones del aeropuerto de Barajas para provocar un colapso de sus terminales. En este grupo también participó activamente un miembro de la entidad separatista Asamblea Nacional Catalana (ANC).

El informe policial concluye el corte de la AP-7 y muchos de los disturbios fueron organizados en el municipio frases de Le Perthus, también próximo a la frontera. Para apoyar esta idea, la Guardia Civil se basa en las imágenes que Campmajó tomó con su teléfono móvil del lugar donde iban a tener lugar los hechos cinco días antes de que ocurrieran. También se han encontrado listas de gastos que conllevaron los preparativos de estas acciones.

Entre ellos había partidas de peajes tanto en Cataluña como en Francis, gasolina, cenas, coches de alquiler y hoteles, entre otros. En este punto, el objetivo de los investigadores es tratar de averiguar quién financió todas estas acciones. Al igual que ya hicieron en anteriores ocasiones los miembros de Tsunami Democràtic se mensajeaban usando nombres falsos por si eran interceptados por las autoridades. Este informe también cuenta con el listado de las personas que estaban detrás de los pseudónimos.

Redacción