Control Motocicletas N 232 Las Merindades Burgos

Pretende concienciar en el uso de sistemas de seguridad, en las condiciones técnicas para circular y en el cumplimiento de las normas de circulación vial y la velocidad. Se incrementarán los controles, pruebas de alcoholemia y los test de drogas. El “Plan de Intensificación de los Servicios para el Control de las Motocicletas y Ciclomotores», en marcha desde el pasado 1 julio, permanecerá operativo hasta el 30 de septiembre próximo

19 de julio de 2021.- Con motivo del incremento detectado de la siniestralidad asociada a las motocicletas y ciclomotores registrada, por parte de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil se ha establecido  el “Plan de Intensificación de los Servicios para el Control de las Motocicletas y Ciclomotores», que se desarrolla desde el 1 de julio pasado y que estará en vigor hasta el próximo 30 de septiembre.

La finalidad es controlar que se cumplen las normas más importantes que afectan a la conducción de motocicletas y ciclomotores, con el objetivo de conseguir un cambio de actitud y comportamiento que se traduzca en un descenso sostenido en el tiempo de la siniestralidad de los motoristas.

En el marco de este Plan, el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Burgos, encargado de la vigilancia, control y seguridad de las carreteras en la provincia, ha diseñado un operativo dirigido a la prevención y concienciación de conductas que ponen en peligro la Seguridad Vial y sobre todo la vida de las personas, para lo cual que se ha intensificado el número de servicios y la vigilancia y control en las autovías, carreteras nacionales y vías secundarias.

Velocidad, maniobras peligrosas, alcohol y drogas

Las actuaciones van dirigidas a la inspección de la documentación y a verificar que los vehículos cumplen con las condiciones técnicas exigibles para su circulación, especialmente en lo referente al estado de los neumáticos.

En el ámbito de la circulación se controla el cumplimiento de los límites de velocidad, prestando especial atención a las conducciones negligentes y a las maniobras más peligrosas, como los adelantamientos, el uso de intermitentes y los cambios de carril.

En la parte que corresponde a los conductores, las actividades propuestas se encaminan al incremento del número de controles, pruebas de alcoholemia y test de drogas, para detectar y erradicar conductas irresponsables bajo sus efectos; también que piloto y acompañante hacen uso de los sistemas de seguridad, como lo es el casco homologado protector de la cabeza.

La Guardia Civil recuerda que la mayoría de los accidentes se producen en los desplazamientos cortos y en carreteras secundarias; la posibilidad de sufrir un siniestro mortal aumenta exponencialmente con el consumo de alcohol/ drogas, con la velocidad y con las distracciones al volante como lo es el uso del teléfono móvil.