oposiciones policia nacional guardia civil 2013

LA PASARELA

Debo reconocer que cuando oí por primera vez la propuesta del ministro de una “pasarela” para que aquellos guardias civiles que lo deseen puedan pasarse a la Policía Nacional tuve mis recelos, creí que era un paso más para los que llevan más de 170 años deseando que la Guardia Civil desaparezca, más tarde pensé que en realidad, sería algo bueno, sobre todo para esos compañeros que no se sienten guardias civiles, que no creen en la Institución, que no valoran sus méritos, que no se sienten orgullosos de pertenecer a la Institución mejor valorada por los españoles año tras año, y que a cada oportunidad que se les brinda intentan desprestigiarla, aún perteneciendo a ella.

Sé que es solo una “pasarela”, es decir un puente pequeño, y provisional, algo temporal para salvar un espacio, el espacio que media entre sentirse guardia civil con todo lo que ello implica o no, ahora no deberían tener excusas para abandonar un Cuerpo donde no se sienten a gusto, pero me temo que las tienen, que sus deseos van mucho más allá de una pequeña pasarela, quieren todo un puente, el de la unificación, para conseguir la desaparición definitiva de la Guardia Civil.

Entiendo a esas personas que se han preparado para desarrollar un trabajo, en el campo que sea y al final debido a las circunstancias, jamás trabajan en el campo profesional para el que se han preparado, lo vemos cada día, ahora mucho más, entiendo que ellos se sientan frustrados, que no estén a gusto en su trabajo, porque sencillamente no es el suyo, el pertenecer o no a la Guardia Civil es algo voluntario, y no entiendo por lo tanto a quienes durante meses se están preparando en una Academia, bajo el sistema educativo específico, que desde el principio se ve como es, donde además de las enseñanzas particulares para ejercer tu labor diaria como futuro guardia civil, recibes otras claramente militares, haces por ejemplo instrucción, es decir recibes una enseñanza militar, no entiendo que en el año que posteriormente tienen de prácticas reales, en la calle, no se den cuenta de donde se han metido y no entiendo que al cabo de ese año y cuando ya son guardias civiles de pleno derecho, es decir han conseguido sus logros, decidan que hay que acabar con la Guardia Civil, simplemente porque es un cuerpo policial de naturaleza militar, y no lo entiendo porque lo primero que aprendes es, su historia, su organización, su funcionamiento y su dependencia, desde el principio lo primero que te explican es que la Guardia Civil se crea claramente con una función pública al servicio de la Administración Civil, y así se ratifica años después de su nacimiento en la Ley del Ejercito, de 29 de noviembre de 1878, donde se determina que su función predominante es el de policía civil dependiente de las autoridades civiles, en lo relativo a su «servicio peculiar», por lo tanto no pueden sorprenderse tras salir de la Academia del carácter militar de la Guardia Civil dependiente de autoridades civiles, en el servicio peculiar.

Ahora se les brinda una “pasarela”, una oportunidad para que cambien de cuerpo policial, para ser felices con su trabajo, para que cambien de cuerpo policial, ya pueden ser policías civiles exclusivamente, ya pueden pasarse a la Policía Nacional y sentirse realizados plenamente en su trabajo, ser felices con lo que hacen, pero no, quieren más, quieren simplemente que desparezca la Guardia Civil.

Los sindicatos de Policía y algunas de las asociaciones profesionales de la Guardia Civil, no quieren esa “pasarela”, de los sindicatos policiales lo entiendo, luchan por lo suyo, por sus intereses y los de sus afiliados, estos podrían perder destinos o puestos en el escalafón, pero de las Asociaciones Profesionales de la Guardia Civil, de aquellas que vienen luchando por quitar el carácter militar de la Guardia Civil o por la unificación con la Policía, mayoritarias, no me lo esperaba, de verdad que no, porque ahí tienen su vía de escape, o quizás jueguen a la incongruencia, o a la hipocresía, como alguno de sus líderes que luchan con ahínco para que no se aplique el Código Penal Militar a los guardias civiles y piden cuando son ellos los juzgados que se les aplique ese Código Militar porque es más benévolo que el Civil, una especie de justicia a la carta; por otro lado sé que todos los afiliados a estas asociaciones mayoritarias, no lo están porque comulguen con sus dogmas, sus directrices o su ideario, y me consta que es así porque tengo compañeros que pertenecen a las mismas, y por supuesto no lo están porque quieran dejar de ser guardias civiles, más bien por las coberturas que ofrecen al ser mayoritarias y disponer de más dinero, y eso está bien, pero que no se equivoquen porque sus propios asociados podrían darles la espalda.

Ni siquiera se puede alegar que la Guardia Civil es única en Europa o en el mundo, o que es algo residual o del pasado, existen otros cuerpos policiales de idénticas características, la Gendarmeríe Nationale de Francia, en Portugal a la GNR (Guarda Nacional Republicana), en Italia a los Carabinieri, en Rumanía está la Jandarmeria Românâ y en Holanda la Koninklijke Marechaussee, todos ellos cuerpos policiales de carácter militar, que conviven en sus respectivos países con policías exclusivamente civiles sin problemas. Ni siquiera es nueva la “pasarela”, ya existe un precedente en Francia, entre la Policía Nacional y la Gendarmería, aunque en este caso se trata de un “puente” en ambos sentidos.

Se pueden mejorar muchas cosas es cierto, y hoy con las Asociaciones se están consiguiendo, es cierto también que todavía queda mucho por hacer, pero estamos en el camino por mucho que alguien quiera negarlo, pero no se mejora atacando e intentando destruir algo que lleva funcionando de forma ejemplar más de 170 años, se mejora exigiendo esas mejoras, no tirando por tierra la labor de toda la Guardia Civil, y son las Asociaciones profesionales las que deben hacerlo sumando esfuerzos, planteando alternativas y soluciones, luchando de verdad por la Guardia Civil, no luchando por intereses políticos o personales.

Yo personalmente he sido feliz como guardia civil, me ha gustado mi trabajo, y lo he desarrollado lo mejor que he sabido, sabía dónde me metía al ingresar y aún así quise ser guardia civil, sabiendo que ello implicaba ser también militar, no me ha molestado saludar a mis superiores o a mis compañeros, me siento orgulloso de la Guardia Civil, quien ingresa en el Cuerpo no puede olvidar que ser guardia civil es algo que se elige, es voluntario, es una forma de ser, una forma de vivir, es cierto que implica sacrificio, abnegación, pero que trabajo no implica eso, pero también da satisfacciones personales y profesionales, hasta los policías nacionales son abnegados y se sacrifican todos los días, pero no intentan acabar con lo que han querido ser, se sienten orgullosos igualmente de ser policías, no podía ser de otra forma, también es voluntario y lo eligieron.

Yo he sido feliz siendo guardia civil y por supuesto jamás vendería mis sueños, mis anhelos, mi vocación o mi dignidad por 165 euros más al mes, o por menos de una hora más de servicio al día, que son las diferencias con la Policía Nacional, simplemente porque yo quise ser guardia civil, de lo demás, de los saludos, de las supuestos problemas con los jefes, me consta porque tengo buenos amigos en la Policía, que en todos sitios cuecen habas, lo mismo me da decir “a sus órdenes mi teniente”, que “buenos días señor Comisario”, porque mi trabajo al final lo tengo que hacer yo, tenga a quien tenga por encima de mí, al final todo se circunscribe, seas guardia civil o policía nacional a acatar lo que te ordenen mientras no vaya en contra de las normas establecidas, es así de sencillo, lo demás es demagogia pura, y para eso, para contentar a los descontentos, se les brinda la “pasarela”, de esta forma solo se quedarán en el Cuerpo aquellos que quieran hacerlo, que de verdad quieran y se sientan orgullosos de ser guardias civiles.

Antonio Mancera Cárdenas, guardia civil retirado