Francisco Jose AlcarazCuando mi amigo Antonio Mancera, me pidió la colaboración para formar parte de las personas que darían la bienvenida al proyecto de este diario digital, tengo que decir que esta petición, me hizo recordar muchos momentos vividos que han marcado mi trayectoria personal.

Como muchos sabrán el más destacado es el asesinato de mis sobrinas gemelas que con tan solo tres años, Mirian y Esther y mi hermano Ángel con 17 años, junto a 8 vecinos del Cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza. Lugar en el que residí a finales de los 80. Por lo que tuve la oportunidad de conocer y convivir con las familias que allí fueron masacradas por los asesinos de ETA.

La experiencia de vivir en un Cuartel de la Guardia Civil me ha llevado a conocer más de cerca el sacrificio y esfuerzo que este cuerpo realiza por el bien de España. Mi cuñado Juan (padre de las gemelas asesinadas), a pesar de llevar toda la vida en el cuerpo y después de salir tras varias horas enterrado bajo los escombros aquél 11 de diciembre del 87, aún con lo padecido, sigue en activo defendiendo lo que significa ser un buen Guardia Civil. » La Guardia civil muere pero nunca se rinde».

En estos tiempos tan difíciles por los que estamos pasando los españoles, a muchos les cuesta poder asumir el cambio de calidad de su vida. La Guardia Civil por desgracia, siendo el cuerpo más sacrificado y peor pagado, siempre ha estado ahí en primera línea. Las adversidades económicas y las precarias situaciones que se ha vivido y viven algunos en los cuarteles, no influyen en su compromiso adquirido.

Podría extenderme en varios folios y aún así seguro que quedaría algo olvidado, pues son en muchos ámbitos donde este cuerpo desarrolla su impecable labor.

Termino deseando a este diario digital especializado en la Guardia Civil, los mayores éxitos de difusión. Estoy seguro que nunca serán suficientes los medios que se utilicen para ayudar, informar y colaborar con todas y cada unas de las necesidades de los agentes y como no, también la de sus familias, padres, esposos y esposas, hijos, que junto al Guardia Civil. Ellos también sufren y padecen el sacrificio por España.