en la valla

NO ES HIPOCRESÍA, ES MALDAD

Dicen que es hipocresía, así lo cree y lo explica al menos este domingo Cristina López Schlichting, en su columna en La Razón, Hipocresía Española la llama, pero yo creo que es algo peor, es la maldad por la maldad, es querer acabar con quien destaca, con algo que funciona, con quien se dedica a vigilar, quien se dedica a custodiar nuestras fronteras, es querer aniquilar a quienes consideran enemigos tan solo por hacer cumplir las normas, es querer acabar con los únicos que se enfrentan a un problema al que no se atreven a enfrentarse ni siquiera los que los ponen y los exponen en la valla, que les ordenan vigilar nuestras fronteras.

Es necesario acabar con el prestigio de una Institución, incluso con la moral de los hombres que la integran para poder hacer las cosas a su antojo, sin cortapisas, sin estorbos, y para eso todo vale, campañas de desprestigio, gritar de forma machacona y cansina desde cualquier escenario contra la Guardia Civil, criminalizarla, intentar cambiar su estructura, su esencia, su idiosincrasia, llegar a  mentir o a pedir imposibles, incluso no conformarse y no querer admitir o acatar un fallo judicial o presionar mediante comunicados para cambiarlo.

Ahora las ONGs, aquellas personadas en la investigación sobre las ‘devoluciones en caliente’ por la que fue imputado el coronel jefe de la Guardia Civil en Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, pidieron ayer el cese del mando del Cuerpo en una nota de prensa, todas juntas, en rebaño o mejor aún en jauría, como suelen hacerlo, a pesar de que los magistrados afirman en su auto de 11 páginas, “que el coronel jefe de la Comandancia de la ciudad autónoma no prevaricó al proceder al retorno, sobre la marcha, de subsaharianos que acababan de superar la valla fronteriza”, pero no, estas ONGs para pedir el cese del mando de la Guardia Civil dicen que “incluso no habiendo prevaricado, el auto deja claro que ha vulnerado el ordenamiento jurídico«.

Como siempre, esto también es muy español, interpretamos las cosas a nuestra manera, la que nos conviene, las acercamos a nuestro lado, ya que  lo que en realidad y en resumen el tribunal considera es que las órdenes dictadas por Villaseñor, que provocaron que fuese citado por el juez instructor, “siguen el criterio adoptado al respecto por la Dirección General de la Guardia Civil y por los diferentes Gobiernos que han pisado la Moncloa, y no hay más, pero además como conclusión afirma ese mismo auto que «…las resoluciones analizadas se integran en la política estatal de inmigración mantenida durante años en la frontera Sur-Ceuta-Melilla«.

Para que se entienda, la Guardia Civil, sigue los criterios que le indican y los protocolos que le ordenan desde el Gobierno de turno, socialista o popular, por lo que en todo caso y así lo dice claramente el auto, los responsables serían estos gobiernos, pero ¡ay amigo Sancho con la Iglesia hemos topado!, no van a ir estas ONGs., contra ningún gobierno de turno pues pondrían en peligro sus subvenciones, el dinero que se les entrega para realizar su labor, que a saber cuál es, y que no es precisamente la vigilar al vigilante, ni la de ayudar o favorecer la entrada ilegal en nuestro país y ahí radica el problema, en el dinero que se perdería si mordemos la mano que nos da de comer, el problema siempre es el dinero, en este caso también, porque dependiendo del volumen de socios que se tenga, así será la subvención.

Y para hacernos un hueco, para que se nos oiga y se nos conozca, para captar socios, debemos utilizar todos los medios, y han encontrado el mejor de todos, atacar a la Institución más valorada por los españoles, tratar de desprestigiarla, de criminalizarla, un método que curiosamente han venido haciendo los asesinos de ETA de forma sistemática, denunciando torturas y malos tratos cuando eran detenidos, llevando a juicio a los guardias civiles que luchaban contra los terroristas, contra ellos, a pesar de que uno a uno, esos juicios se caian por su propio peso, se desmontaban las mentiras, y es que como me dijo un abogado no hace mucho, al criminal le está permitido mentir para defenderse.

Y digo «curiosamente utilizado», porque hace poco ha salido a la luz un informe, quizás sea este el supuesto informe al que Guillermo Toledo se refirió cuando al hablar de lo sucedido en El Tarajal acusaba a la Guardia Civil de ser los responsables directos de la muerte de 15 inmigrantes, firmado por un “supuesto” médico forense, y lo de “supuesto” lo entrecomillo no porque no lo sea, sino porque tan solo ejerció como forense algo más de un año entre 1991 y 1993, que ya ha llovido, incluso para la medicina forense, se trata de Luis F. Callado de la Universidad del País Vasco, más conocido como «Koldo Callado», y que imparte clases de Farmacología en la mencionada Universidad, aunque quizás sea más conocido en el campo de la investigación con cannabinoides -componentes de la planta cannabis sativa-, pero no es tan grave que ande todo el día con el cannabis, como estudio claro, no seamos mal pensados, como que esté identificado plenamente con la izquierda abertzale, y esto es grave sabiendo que el informe que ha firmado, «Estudio e investigación sobre las autopsias de los cuerpos hallados en las costas de Ceuta», sin haber realizado ni una de estas autopsias, con el que trata de vincular la actuación de la Guardia Civil con el fallecimiento de los inmigrantes que intentaron entrar de forma ilegal en España el 6 de febrero de 2014, es una copia de aquel otro presentado poco después de la tragedia de El Tarajal, realizado por «Ca-minando Fronteras», que mira que me mosquea lo del guión, por lo de «minando» fronteras, bajo el título de «Informe Tarajal marzo 2014», mismo informe, misma autoría, ya que su principal promotora fue Helena Maleno, como digo el nuevo infore, no deja de ser una nueva copia de aquel de marzo de 2014, pero este se presentó hace tan solo un mes, cuando ya ha pasado más de un año de la tragedia. Entonces no se dio crédito a dicho informe, en el que supuestos testigos informaban de malos tratos y supuestos médicos forenses firmaban supuestos informes médicos, entre otras cosas porque nunca se pudo conocer a unos y otros, o llamarles a declarar ya que sus nombres, el de los médicos y sus números de colegiados no aparecían, e incluso los hechos relatados y lo que se describía en el mismo no aparecía en ninguna de las cámaras de vídeo, ni tampoco se encontró a ninguno de estos supuestos testigos, cuyos nombres y filiación también aparecian tachados, para que corroboraran dichos malos tratos, como se ve todo «muy supuesto», y muy poco real.

Es curioso decía, que las estrategias, de etarras y de estas supuestas ONGs, sean parecidas, incluso que se apele a un forense próximo a la izquierda abertzale para que de validez hoy, a un informe que se elaboró hace un año por una de esas ONGs., y que ya entonces nadie tomó en cuenta, con el único fin de menoscabar, de dañar la imagen de la Guardia Civil, como intentaban hacer los terroristas.

No, no es hipocresía, es mas bien maldad, hipocresía es que desde las filas de la bancada socialista en el Congreso, se pida la comparecencia del Ministro del Interior para que hable sobre este informe, informe manipulado, antes y ahora, la misma bancada que hace unos años, estando en el Gobierno, aprobó el uso del material antidisturbios, así como los protocolos a seguir ante la entrada masiva de inmigrantes por nuestras fronteras, y que aún hoy se siguen.

No es algo nuevo, en definitiva no es más que el deporte nacional de España, ese que no permite valorar lo bueno que tenemos y nos lleva a destruir todo aquello que funciona, en ocasiones incluso desde dentro, para que así nadie destaque, para que todos seamos mediocres y no podamos echarnos en cara nada unos a otros, todos igualitos, y es que la Guardia Civil se encuentra muy por encima del resto de instituciones y organismos del Estado, y eso hoy por hoy, molesta y duele.

Antonio Mancera Cárdenas, guardia civil retirado