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Pablo Iglesias, no Posse el fundador del PSOE, sino el otro, Turrión el líder de Podemos, el de los principios de Julius Henry Marx, más conocido como “Groucho Marx”, que decía “Estos son mis principios, si no le gustan tengo otros”, se cree que todos los que no pensamos como él somos tontos o “fachas”, al menos nos toma por tales, seguro que al discrepar y criticar su actitud, dirá que soy un “facha” o un «sinvergüenza», en fin.

Pues bien, Pablo Iglesias, no Posse, evidentemente el otro, ha defendido hoy en el programa de Ana Rosa, en Telecinco, que la marca blanca de su partido en Pamplona, Aranzadi-Pamplona en Común, apoye a los proetarras de EH Bildu para que estos accedan a la alcaldía de la ciudad.

Iglesias, el “otro”, además con una gran hipocresía e incoherencia, nos dice que le «parece de vergüenza que en este momento alguien se atreva a utilizar la memoria de las víctimas» para decir «a quién ponemos de alcalde«, y añade que lamenta que los «corruptos» puedan utilizar un «terrible sufrimiento» para criticar los pactos, a los que tacha y llama además «sinvergüenzas«.

Más tarde, y aquí es donde ya nos toma por verdaderos gilipoyas, nos dice que «cualquiera que se tenga que poner de acuerdo con nosotros tiene que respetar los derechos humanos, y condenar y rechazar cualquier fórmula de violencia y creo que eso ha estado claro«, pues hombre, yo claro, claro no lo veo, perdón por mi ignorancia.

Y es que nos vuelve a mentir una vez más, es fácil hacerlo si nadie le replica y es fácil hacerlo si a quien lo hace le tacha directamente de “facha”, “fascista”,  «corrupto» o «sinvergüenza«, es el recurso fácil para mantener la mentira, y nos vuelve a mentir porque lo que si tenemos claro y mucho, es que EH-Bildu, formación proetarra, cercana, muy cercana a los asesinos, todavía no ha condenado el terrorismo de ETA, no ha condenado sus asesinatos, sus atentados, incluso en ocasiones aboga, se manifiesta, presiona a favor de los presos de ETA que nunca respetaron los derechos humanos de sus víctimas, y eso es una “fórmula de violencia” se mire por donde se mire, presos etarras que también tenemos claro que nunca fueron presos políticos, como usted y ellos nos quieren hacer creer, simplemente son criminales, asesinos y terroristas.

Nos dice que le parece “…de vergüenza que alguien se atreva a utilizar la memoria de las víctimas…”, aunque lo que es verdaderamente vergonzoso es apoyar a auparse en el poder a los que se declaran próximos a ETA y no condenan los crímenes de la banda asesina, los que realmente dan vergüenza son aquellos que “pactan” con los con los que apoyan y ayudan a ETA, lo que es de vergüenza es aumentar el «terrible sufrimiento» de las víctimas de ETA, ayudando a llegar a las instituciones democráticas a aquellos que han utilizado la violencia, que han asesinado, masacrado, mutilado, extorsionado, expulsado mediante amenazas del País Vasco a quienes no piensan como ellos, es vergonzoso que auténticos tiranos utilicen las instituciones democráticas para velar por los intereses de los asesinos, eso es lo verdaderamente vergonzoso, apoyar a los que causaron “el sufrimiento de las víctimas”.

En democracia, el que te «critiquen» en este caso por un «pacto» con quien defiende y apoya a los terroristas, es mas o menos de esperar, entra en el juego de la politica, como usted bien sabrá, el insulto sin embargo, al que es tan dado cuando le critican, es algo que sobra, tampoco son de recibo las «amenazas«, veladas o no, pero el querer justificar una acción, el querer justificar este «pacto», de una forma tan burda, nos da a entender que sabe que el mismo no es «tan justificable» como nos quiere vender y que el mismo va a repugnar a una inmensa mayoría de la sociedad.

Por último, lo único que tengo claro es, que es usted al justificar estos “pactos” el único que agrede la “memoria de las víctimas” y, que es usted el único que al apoyar estos “pactos” vuelve a infringir un “terrible sufrimiento” a las victimas del terrorismo.

No olvide que quien «pacta» con el diablo, tiende a perder el alma o a quemarse en el infierno.

Antonio Mancera Cárdenas, guardia civil retirado.