En cierta ocasión, acompañe a nuestro Presidente ya fallecido D. Antonio Mancera López en calidad de vocal de Circulo Ahumada, a dependencias de la Guardia Civil situadas en la calle Guzmán el Bueno de Madrid, allí nos esperaba el Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil.
La reunión no era otra que la de darnos a conocer, pues era lector asiduo de Benemérita al Día, (el periódico digital de Círculo Ahumada).
Entre las conversaciones que allí mantuvimos, se propuso redactar en nuestro periódico (¿Para cuando un general de cuatro estrellas en la Guardia Civil?), pues es bien sabido, que estos cargos están reservados para cuerpos militares y al benemérito cuerpo parecen no llegar a pesar de ser considerado militar.
Para ello, hay que remontarse a sus orígenes, pues en el propio decreto de fundación, la Ley Constitutiva del Ejército de 29 de noviembre de 1878 se habla de una fuerza civil de seguridad pública que en cuanto a organización y disciplina depende de la jurisdicción militar.
Con la Constitución Española de 1978 se realiza una distribución clara entre las Fuerzas Armadas y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, siendo la Guardia Civil parte integrante de estas últimas y como establece la Ley Orgánica 2/1986 tiene “naturaleza militar”, al tiempo que la Ley 42/1999 de Régimen de Personal del Cuerpo de la Guardia Civil le atribuye un régimen de personal propio.
Desde el Círculo Ahumada – Amigos de la Guardia Civil y a través de su diario digital «Benemérita al Día, queremos hacernos eco de la que creemos justa demanda de los citados ascensos, pues estamos firmemente convencidos de que en la Guardia Civil también son merecedores de ello.
José Ignacio Rentero Vicente
Vocal del Círculo Ahumada – Amigos de la Guardia Civil
